Los odontólogos, como integrantes del equipo de salud, están obligados a actuar con especial responsabilidad y sentido ético. No sólo deben contar con la matrícula profesional habilitante; una valoración periódica del proceso de educación continua les permite mantener un nivel de competencia profesional adecuada.

Los conocimientos adquiridos por los profesionales durante el período de formación de grado, independientemente de su calidad, no garantiza un desempeño profesional idóneo indefinidamente. La universidad los capacita para iniciar una carrera profesional y aporta los cimientos para continuar la educación durante toda la vida profesional del individuo.

Debido a los constantes cambios en el conocimiento científico y la permanente evolución de la odontología, que modifican significativamente las prácticas, es fundamental que el profesional mantenga un espíritu inquisitivo y actualice permanentemente su formación.

Si bien la misma experiencia de la práctica profesional contribuye al desarrollo de los principios teóricos, es el mantenimiento de su formación intelectual lo que pondrá al profesional (enfrascado en la actividad cotidiana) al tanto de las modificaciones permanentes que surgen de las nuevas tecnologías, cambios sociales y modalidades de trabajo, entre otros aspectos.

La formación profesional permanente debe constituir un proceso ininterrumpido, desde el ingreso a la facultad hasta el momento de la jubilación. De esta manera se evitará la obsolescencia progresiva de la competencia profesional.

Se concibe a la actualización constante como el conjunto de experiencias que siguen a la formación de grado y que permiten al odontólogo mantener, aumentar y mejorar su competencia para que esta sea pertinente al desarrollo de sus responsabilidades éticas y sociales.

Se trata de una obligación moral y ética para todos y cada uno de los odontólogos y tiene como requisitos esenciales ser auténtica, eficaz y asequible.

Una cuestión de ética

El Colegio Odontológico de la Provincia de Córdoba (COPC) explica que la obligatoriedad en el cumplimiento de la formación profesional permanente no debe interpretarse como un acto de exigencia infundado hacia el colegiado. En cambio, intenta que se comprenda como una motivación hacia una actividad que debe ser natural, encuadrada en las normas éticas del profesional, tal como está expresado en los estatutos y en el Código de Ética y Disciplina: Ley 4806, Capítulo VII, Artículo 36.

Dicha normativa reza: “Es contrario a la ética no continuar perfeccionando los conocimientos y técnicas profesionales y no mantener actualizada la habilidad profesional por medio de la educación continua durante toda la vida profesional activa”.

Las ventajas de actualizarse

Al crearse la cultura de la reválida ética de la matrícula, desde 2010, los odontólogos que ejerzan en el ámbito de la provincia de Córdoba tienen la posibilidad de enfrentar con mejores capacidades los retos del nuevo siglo, tales como la globalización, la competencia y la excelencia. De esta manera, se otorga a la sociedad un profesional actualizado que pueda ofrecer servicios odontológicos de calidad.

Del mismo modo, una capacitación permanente permite mantener una relación respetuosa entre los colegas, ya que el deterioro de los conocimientos por parte de los miembros de la comunidad odontológica afecta la imagen de la profesión y daña el vínculo entre los mismos.

Por otra parte, se cumple con el deber ético para con la sociedad y el Estado, ya que la habilitación otorgada por el Colegio Odontológico a través de la matrícula exige el correcto uso de los conocimientos para el bien de la población que solicita los servicios del profesional.

Un mes de disertaciones

El Colegio Odontológico de la Provincia de Córdoba brinda capacitaciones constantes, de manera presencial en todo el territorio cordobés, y mediante plataformas virtuales para lograr llegar a todos los matriculados dispersos en el país.

Durante todo este mes, en el marco del festejo del Día del Odontólogo (se celebra cada 3 de octubre), se llevarán a cabo disertaciones de distintos profesionales y especialidades.

Fuente: Colegio de Odontológico de la Provincia de Córdoba.